La mayor parte de los pacientes que vienen a mi consulta por problemas de ansiedad esperan que la podamos eliminar rápida y definitivamente. Lo normal es que ya lleven bastante tiempo luchando contra ella y que hayan intentado multitud de remedios distintos. Es en ese momento cuando empiezo a plantearles un cambio en la estrategia que han estado utilizando hasta ese momento para luchar contra la ansiedad.
SI ME ESFUERZO MUCHO NO SENTIRÉ ANSIEDAD
Imagina que estas sentado en una plataforma encima de una piscina con pirañas, y que estás conectado a un polígrafo extremadamente sensible que, ante el primer síntoma de ansiedad o nerviosismo, la plataforma cederá y caerás a merced de las pirañas.
Para mantenerte con vida, lo único que tienen que hacer es “no ponerte nervioso ni sentir ansiedad”, ¡es fácil verdad! ¿Qué crees que pasará? Efectivamente, lo más probable es que acabes devorado por pirañas.
Las personas creen que pueden controlar o eliminar sus emociones esforzándose mucho y enfocándose directamente en ellas, al igual que hacen con otros problemas de la vida (como buscar trabajo, estudiar una carrera…), pero nuestro mundo interior no funciona como el exterior.
En nuestro mundo interior, cuanto más intentemos controlar, más se apodera de nosotros, ya hemos visto lo que pasa con las emociones, y al igual pasa con los pensamientos.
SI ME ESFUERZO MUCHO, PODRÉ DEJAR DE PENSAR EN LO QUE NO ME GUSTA
Intenta no pensar en un limón, intenta no imaginar la textura de la piel del limón, ni en el jugo que cae entre tus dedos cuando lo cortas con un cuchillo y, sobre todo, no pienses en que pasa cuando acercas el limón a tu lengua, ni pienses en la sensación que el ácido zumo del limón provoca en tu boca…
¿Qué tal la experiencia? ¿Conseguiste no pensar en el limón?
Como ves, en el mundo de las emociones, sensaciones y pensamientos, cuanto más nos esforzamos por evitarlos, más se presentes se hacen.
¡ABANDONA LA LUCHA!
Así que, paradójicamente, la primera clave para combatir la ansiedad es dejar de combatirla, y centrar nuestra lucha en donde sí podemos ganar, enfocándonos en las cosas importantes: como son familia, amigos, pareja, trabajo, estudios, aficiones, etc.
La lucha se centra en aprender a experimentar y aceptar todas las experiencias de nuestra vida sin evaluar constantemente si son buenas o malas.
Y es en el momento en el que nos damos cuenta de que podemos llevar una vida plena y satisfactoria a pesar de la ansiedad.
¿Y AHORA QUÉ?
Pensarás, ¡ok! Y una vez abandone la lucha ¿qué?, además, los síntomas de la ansiedad son terribles y me cuesta mucho siquiera pensar en que tendré que soportar eso toda la vida.
Por suerte, la terapia cognitivo conductual dispone de un arsenal de técnicas científicamente comprobadas para aliviar de manera eficaz los síntomas de la ansiedad, llegando a reducirlos de forma drástica.
En el siguiente post que publicaré en mi blog te daré 6 claves imprescindibles que podrás aplicar en tu día a día para aliviar los síntomas de la ansiedad, y recuperar el control de tu vida.
