¿Cómo detectar un ataque de pánico? | Características más comunes

¿Cómo detectar un ataque de pánico? ? | Características más comunes

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Sufrir un ataque de pánico es algo relativamente común, aunque dicho así pueda parecerte algo exagerado. Basta echar un vistazo a las estadísticas para comprobar que ocurre a nuestro alrededor cada día. Incluso puede pasarnos a ti, o a mí.

¿Qué es el pánico?

El pánico es una emoción exacerbada: un miedo muy intenso.  Seguro que lo has sentido algunas veces, porque es una emoción común a todos los seres humanos (a todos los seres vivos) y que a cada uno nos afecta en medidas y por causas diferentes.

Para explicártelo de forma simple: el pánico es una graduación muy elevada del miedo y, como él, también puede deberse a distintas causas.

Algunos sentimientos de pánico son generalizados, y la mayoría somos capaces de empatizar fácilmente con ellos, como el pánico a que le pase algo a un ser querido, o a sufrir un accidente. Otros son de cosecha propia y están relacionados con el mundo interior de cada uno, como los causados por malas experiencias personales.

¿Qué es un ataque de pánico?

El ataque de pánico sucede cuando esa sensación de miedo acentuado aparece de repente. Te enfrentas de pronto a un terror que no puedes explicar ni controlar. Es tan potente, que incluso puede inmovilizarte y causarte graves reacciones físicas.

Estos episodios pueden ocurrirte de forma aislada, o pueden aparecer en el marco de algún posible desorden. Por ejemplo, es habitual que aparezcan ataques de pánico en el marco de trastornos de ansiedad.

La duración varía. A veces puede afectarte tan solo 10 minutos, y otras veces, si no aprendes a manejar las crisis de ansiedad, pueden durarte varias horas. Por eso, cuando empieza nunca puedes saber realmente cuánto tiempo va a durar. Por ello, es imprescindible conocer sus características, para empezar a gestionarlos correctamente.

¿Cómo puedes saber si estás ante un ataque de pánico?

Conocer la sintomatología característica de un ataque de pánico puede ser muy útil porque si tienes claro cómo se presenta puedes intentar anticiparte. Utilizar alguna técnica de relajación o pedir ayuda especializada son algunas alternativas.

Saber identificar muy bien los síntomas sirve también para diferenciarlo de otras posibilidades, por ejemplo de un ataque al corazón.

El DSM (Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales) recoge los siguientes síntomas asociados al ataque de pánico. Cuando contabilizas cuatro de ellos, es el momento de tomártelo muy en serio. 

Sientes un gran miedo

Sin previo aviso, te invade un terror que no puedes explicar ni controlar sin que tenga que existir un motivo inmediato en la realidad.

Aumenta tu sudoración

Empiezas a sudar de repente, de forma exagerada, sin conexión con circunstancias como la climatología o la práctica de ejercicio físico.

Frecuencia cardíaca rápida o palpitaciones

Tu corazón va más deprisa. Los latidos se aceleran y parece que va a escaparse del pecho.

Notas que te falta el aire

El aire que respiras no es suficiente por mucho que lo intentas. Sientes que no te llega a los pulmones, y no eres capaz de inspirar y exhalar con tranquilidad.

Te sientes mareado

Aparece inesperadamente una sensación de desequilibrio o inestabilidad. Aunque a veces el mareo también puede relacionarse con el aumento de la frecuencia cardíaca.

Dolor y presión en el pecho

Es habitual notar una opresión muy dolorosa en el centro del pecho que puede llegar a confundirse con un infarto.

Temblores

Ocurren cuando los músculos de distintas partes de tu cuerpo (brazos, piernas o cabeza) se mueven involuntariamente

Miedo a morir

A veces, la muerte puede convertirse en una idea recurrente y el círculo de pensamientos se vuelve interminable.

Miedo a perder el control o a volverte loco

Cuando te encuentras con sentimientos y reacciones que no puedes gestionar ni dominar es normal sentir que estás perdiendo el control.

Hormigueo

En ocasiones, puedes notar una sensación muy incómoda de hormigueo (parestesia) en varias zonas de tu cuerpo, sobre todo en las extremidades (piernas, brazos, manos y pies).

Sofocos o escalofríos

Te sientes sacudido de pronto por mucho calor o un frío intenso. Las sensaciones pueden aparecer de forma aislada, o en orden: primero mucho calor y después frío.

¿Qué puedo hacer?

Un ataque de pánico siempre deja una enorme huella, lo que es completamente normal. El recuerdo de lo mal que lo has pasado, y el miedo a que te vuelva a pasar, son sentimientos muy intensos que cambian la vida.

No desesperes. Aunque es una situación complicada, piensa que con la ayuda adecuada todo va a mejorar. Confiando en un psicólogo profesional recibirás la atención que necesitas: una buena orientación terapéutica y unos oídos entrenados y atentos a tus preocupaciones. Estoy seguro de que trabajando juntos encontraremos la manera de superarlo.

? ¿Qué es un ATAQUE DE PÁNICO y por qué se PRODUCE?

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Guillermo Orozco

Guillermo Orozco

Psicólogo en Las Palmas de Gran Canaria. Graduado por la UNED y Máster en Psicología General Sanitaria por la Universidad Autónoma de Madrid. Especialista en trastornos de ansiedad y trastornos del estado de ánimo. Experto en Terapia de Pareja y Terapia Online.

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